jueves, 21 de noviembre de 2013

Detrás de cada dama una hija de puta


El día que nos encontramos acabamos perdiéndonos a nosotros mismos; y ahora cada vez que nos acercamos tú miras a los ojos a mi culpa y mi boca sigue buscando una expiación.

Parece que sólo sabes hablar de la forma en la que hacíamos el amor y echábamos a suerte querernos. Sigues rechazando la caricia de mi mano que se queda a medio camino entre tu cara y mi corazón.

Me culpas de inmiscuirme en la letra de tus canciones favoritas y a mi, me parece que las aceras de mi calle son las únicas que aún se acuerdan de ti.Hay machas de odio en el cuero que ya solo el sudor puede limpiar.Pero ni tú quieres, ni yo te sigo encontrando encanto alguno.Te quise tan poco y me costó tanto acostumbrarme otra vez a vivir sin ti.

Te escribiría algo más,pero siempre sería por puro compromiso. Todo quedó dicho aquel día, al menos mis últimos sentimientos por ti murieron por impacto contra el parabrisas de mi coche. No te quiero, no te deseo y ya no sigo repitiéndome cada mañana frente al espejo que debería estar echándote de menos.

Pero dime ¿sabe ella que aún piensas en mi cuando te las follas? Que coño, incluso es posible que ella también me piense de vez en cuando.

Puntos suspensivos


La última copa de Baudelaire, el contrato del alma de Fausto, el primer beso de Becquer, un mapa de Macondo, el delantal de Alicia, el pendiente de Shakespeare, un tornillo de Frankestein, las botas de Alatriste, el nombre Capuleto, el camisón de Doña Inés...

Todos esos fragmentos, toda la tradición, la cultura y la historia que llevamos cada uno dentro sin saberlo. El Arte que respiramos, que parece rodearnos, que viene a jugar con nosotros. En el fondo todos tenemos una corteza dura y de cuero por fuera y mil historia sin leer por dentro.Somos los eternos libros inacabados y sin embargo también somos los más completos.Almacenamos tantas tendencias, tantos estilos, tantos escenarios, tantos personajes, tantos versos que son dignos incluso de un Premio Nobel.

Hay veces en las que creo que me gustaría conocer a todas las personas del Mundo, escuchar sus historias y de algún modo tomarlas prestadas y contárselas a los demás ,como si convirtiera pequeñas partes de mi en ejemplares de segunda mano de ellos.

lunes, 11 de noviembre de 2013

Mi casa rosa de muñecas


Algunas cosas son más maravillosas porque no duran
de niña deberían haberme hablado del hedonismo en lugar del príncipe azul

El placer por el placer
el egoísmo carnal
la vanidad y el narcisismo

Escribir como quien toca las teclas del piano
crear una nueva partitura

El temor a consumir un nuevo amanecer
a no ser nunca más amado
a jugarse todo al Azar con una moneda en la que sólo sale cara

La  libertad de unas manos que se enredan en el pelo
o en el cuello de cualquier camisa

La intensidad de las llamas
Cuando no ciegan ni queman

Y la utilidad de rezar para abrir el cielo de alguna boca
labios que se abren y desquician reclamando una libación

El juego del Miedo
donde siempre el último que llega es el ganador

Los distintos instantes de la vida, que es en si misma un instante
el verbo del Amor que es absurdo conjugar
y que pierde todo el sentido después de haber sido repetido muchas veces

La mueca que te devuelve cada mañana el espejo
las lágrimas de borrachera
la persona que crees ser
y los fragmentos hirientes de lo que realmente eres

El arte tras el que se oculta el artista
y los poetas con sus putas metáforas desgarrando corazones

El placer de repetir
de hallar felicidad más allá de la verdad

La manos que exploran un cuerpo
el sexo que conoce por primera vez la  boca del amado

La limitación latente en cada definición
el  placer de plantarle cara al Destino

Los viajes que  nunca haré
la  gente que no conoceré
las cosas que nunca seré
todo ese camino que discurre en mi interior

El inconformismo de estar siempre insatisfecho
los placeres inacabados

Las caricias en la espalda
los besos que pesan sobre la piel
el miembro que se yergue ante la presencia de un cuerpo desnudo

Las curvas de la mujer
las cuerdas de la guitarra
la realidad de las palabras
el sabor del veneno
el tacto de la música
el sonido de la venganza

Dar tu brazo a torcer a la tentación
la atracción de lo desconocido
la maravilla de lo efímero
la envidia de lo eterno

La muerte
la vulgaridad
la realidad personal, que nunca será explicada ni oprimida

La decadencia de la vejez
en la mente de aquél que aún recuerda la juventud

El concepto de la virginidad
la desactivación de la sexualidad

La delicadeza de lo vulgar
y de todo aquello que perdura incluso después de muerto

Los apetitos que se hacen cada vez más voraces a medida que son satisfechos
el camino a la desilusión
la abstracción del arte

Las pasiones, los miedos y los amores que hallan la muerte en su propia plenitud

El amante que es infiel
el tacto de aquello que es sagrado
el cerebro que se convierte en corazón
el ingenio que vence la soledad

El uso,el disfrute y la propiedad de las emociones

Nada de lo que queda aquí escrito tiene sentido,pues habla de todo aquello que en verdad desconozco pero que estaría encantada de amar.

Para acabar corrompida y eternamente enamorada de una vida sustentada a base de cinismo y autocomplacencia .

lunes, 4 de noviembre de 2013

Un diario de marcas en la piel



Odio a la gente que intenta imponer su opinión chillando, que me toquen los tatuajes sin permiso, bueno que me toquen en general,la gente que solo sabe hablar de política,que las farolas no me dejen ver las estrellas, la gente que huele a alcohol en el metro, los que no respetan los ceda el paso o no te facilitan la incorporación en los atascos.

Me saca de quicio que me abracen después de follar , ir de la mano por la calle, que me llamen de madrugada o que me digan un ``te conozco mejor de lo que crees''.Repelo la tecnología y más aún a aquellos que la usan para evadirse de la realidad, a la gente que no escucha y a los que interrumpen en mitad de una conversación sin saber realmente de que se está hablando.

No me gustan las películas mal dobladas, el buffering, ni ir al cine a ver una película con alguien que se ha leído el libro. Que me arranquen los puntos de sutura o remuevan temas del pasado.Tener que cambiar la ropa del armario en cada estación y que me muevan las cosas de sitio.

Me cabrea la gente que coge tus cosas sin pedir permiso,los niños que chillan y corren en los restaurantes y que la báscula marque un kilo más. La gente que mastica con la boca abierta, que estornuda sin taparse la boca y los que cantan villancicos. Las minifaldas, la gente que baila sobre las tarimas, la cerveza caliente y el garrafón.

Me desesperan las huelgas de metro, la gente que ocupa dos asientos en el autobús, llevar los cascos por la calle y que me paren a preguntar, el tono que emplea la gente para hablar a los bebes y que se quede comida en el plato.

Soy una maniática, una lunática, una quejica, una tocapelotas. Pero prometo que puedo  aprender a comportarme a cambio de desquiciar también tu vida. Lamento decirte que no tienes opción, porque ante todo lo que más odio ,es que me digan que ``no''...