martes, 25 de octubre de 2016

Keep bleeding love




Señoras y señoritas, les traigo el secreto mejor guardado de la humanidad; y no, no me refiero a la fórmula de la Coca-Cola o a la edad real de Ana Obregón. Es algo que va más allá, un secreto posiblemente sólo conocido por la KGB y que jamás ha traspasado las paredes del Despacho Oval: EL PERIODO DE LA MUJER. ¿Creéis que es broma? Pensadlo por un momento,al precio al que están los tampones y las compresas es posible que lo que desprenden nuestros úteros no sea el endometrio, sino maná caído del mismísimo cielo.

Os pongo en situación, hoy he tenido que salir de la universidad en busca de tampones. Nunca me había parado realmente a pensar en el precio, prácticamente se había convertido en un reflejo automático al principio de cada mes, hasta hoy. Cuál ha sido mi sorpresa al darme cuenta de que podía cubrir mis "necesidades femeninas" por los pelos con 10 euros. ¡Con diez euros! con ese dinero puedo fumar durante dos semanas, más allá, con esos 10 euros puedes apadrinar a un niño de Mosul; de verdad os lo digo, preguntárselo a los chalecos verdes de ACNUR. Lo que estoy diciendo, es que si no tienes al menos 10 euros no puedes cubrir una necesidad mensual, que es prácticamente más bien una obligación. ¡La regla es un bien de lujo y nosotras sin saberlo!

Iba yo pensado en lo duro que es tener la regla a final de mes y en que la independencia económica y la menopausia deberían ir de la mano, cuando en otro estante me encuentro con otra sorpresa: hay paquetes de preservativos que cuestan la mitad que un jodido paquete de tampax. Vamos, que lo caro es tener vagina. ¿Cómo puede ser más barato un producto que siendo muy (y repito: MUY) optimistas ellos van a usar una vez al mes, frente a otro que nosotras necesitamos al menos 4 o 5 días a la semana mensualmente?

Quiero que me cobren las compresas a precio de hombre. En serio, alguna organización feminista debería convertirlo en su eslogan. Con el dinero que nos ahorraríamos durante toda una vida sin menstruación a los 50 años podríamos cenar todas las noches caviar, todas juntas con ese dinero podríamos pagarle los estudios a un equipo de fútbol. No lo hagáis por nosotras, hacedlo por Sergio Ramos. Igual así funciona...

Claro que, bien meditado, hoy en día no pagamos por un simple tampón o una simple compresa. No, estamos pagando por marcas. Marcas que crean compresas "cotton like", que te aseguran que si vas caminando por la calle un día de lluvia, tu compresa no va a encoger hasta el tamaño de un disco de desmaquillante. Tampones que prometen verdaderas gymkanas y aventuras paradisiacas inolvidables, aunque no te hayas movido del sofá de tu casa en tu puta vida. Compresas que te permiten hacer el pino o esconder toda una familia de arenques entre tus bragas, sin que vayas a tener una sola pérdida o dejes de oler como una mujer se supone que debe de oler. María Valverde ahórrate el cuento y el contoneo en la playa, yo lo que quiero es ver a un chica retorciéndose de dolor y comiéndose hasta el queso con moho de la nevera si con eso me aseguro un precio más barato, más real.

Hasta aquí el primer día de regla de este mes, no os seguiré manteniendo informados. Y recordad, quien tiene un tampón tiene un tesoro.




No hay comentarios:

Publicar un comentario