Es un nombre cálido,con unos ojos castaños enormes y que da los mejores abrazos del mundo (con permiso de mi madre).
Respira, late y ríe a golpe de Rap
Le gusta llevar pantalones con estampados y mantiene algún tipo de lucha interna con su pelo.
Vive acorde al ``hoy por ti y mañana también'' y al ``hasta que tú no sonrías ni se te ocurra preocuparte por mi''.Si no la conociera estoy segura de que la echaría de menos.
Os aseguro que cuando habla hay veces que hasta Neruda pide silencio. Es experta en dar explicaciones sin usar una sola palabra.
No es porque solucione todos los problemas, es porque no permite que te enfrentes a ellos solo si está en sus manos. Nunca deja a sus soldados atrás.
Decir que la quiero me parece innecesario y fuera de lugar. Ella es el primer lugar al que deberíais ir a buscarme.
La encargada de llevar el Rock and Roll al paraiso.
Hace que merezca la pena ir en contra del mundo.
He contado toda la vida con que iba a cometer errores, lo que no sabía era que iba a ser tan divertido hacerlo a su lado.
Comparte mi vicio por la cafeína y por diseccionar a pulso y sin remordimiento, a base de lápiz, los poemas.Además es la traficante de libros más buscada en la Universidad.
Cruzaría todos los semáforos de Madrid sin mirar si ella me estuviera esperando al otro lado con los brazos abiertos y ganas de enseñarme algo.
No le debo la vida, pero si la muerte de la monotonía.
Permitirme una hipérbole, y es que cuando se trata de ella nada parece demasiado grande, pero digo sinceramente que es la única persona por la que valdría la pena renunciar al resto.
Me besa las burradas y me ayuda a buscar el sentido del ridículo por los bares algún que otro viernes.
Es capaz de predecir el parte del tiempo de las lágrimas y de hacer que me olvide en mitad de una de mis revoluciones porqué estaba peleando con un solo fruncimiento de ceño.
Me alegro de no haber llegado tarde y de haberla convertido en actitud vital.
Mi quinta falta personal, mi tiempo de descanso y duda, mi ''a esta invito yo''
Parece que siempre sabe cuando pronunciar la frase perfecta para que decidas salvarte del mundo.
Prometo perder los trenes que haga falta contigo a cambio de que prometas no perder nunca conmigo los nervios.
La declaro inocente. Huracán. Y la jodida sonrisa más bonita de todo Madrid (iba a decir culo, pero prefiero sacarte los colores en persona y en la intimidad). Ser diferente nunca es fácil; me parece la excusa perfecta para explicar la relación de despecho, que no de hecho, que hay entre ambas.
Me deja que la coja de la mano si recita Escandar y el Libertad 8 no se cansa de verla llorar.
La quiero tanto que la abandonaría sin pensármelo dos veces en el momento que ella me lo pidiera. Pero entonces los paisajes dejarían de tener sentido.
Se arranca y canta Suárez o Funambulista fuera de contexto y no agacha la cabeza si le dedico a gritos ``Carita de tonto'' en mitad de Francisco Silvela.
Que no me despido yo, que lo hace ``Un invierno sin sol''. Aunque desde aquella primera noche del verano, en inverno hace frío pero huele a primavera.
``Los espectáculos como tú
lucen más en abierto.
Y el mundo está más guapo contigo ahí fuera.
Bailando''
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